La adopción e implementación de un sistema de gestión eficaz del agua puede conducir a la consecución de estos resultados:

  • Ayudar a las organizaciones a gestionar de forma correcta el agua y optimizar su requerimiento.
  • Incluir el agua en un marco esencial a la hora de planificar las acciones de la empresa y de definir su presupuesto.
  • Buscar la mejora continua en el uso del agua.
  • Concienciar a los miembros de la organización del uso responsable de dicho recurso.
  • Localizar los impactos que provoca el uso del agua en nuestra empresa y en su entorno.
  • Proporcionar un proceso de revisión periódica para posibles mejoras y adopción de oportunidades que surjan de la eficiencia del agua.